Cersei Lannister hija de Tywin y Joanna hermana (y algo más de Jaime) y de Tyrion. Cersei es uno de los personajes más particulares y complejos de La Canción de Fuego y Hielo. Su condición de mujer la ha limitado toda de su vida en sus ambiciones. Quiere reinar, que no ser reina porque eso ya lo llega a ser, pero lo de consorte no va con ella, ni siquiera ser reina madre y regente es suficiente para ella. Tampoco puede heredar Roca Casterly, la fortaleza de su familia por ser mujer a pesar de que es la primogénita. Por todo eso y por proteger a sus hijos, Cersei manipula y conspira pero no es tan lista como se piensa y su vida está condicionada por una profecía que le hizo una bruja Lazarena, conocida como Maggy la Rana, cuando era una niña. La profecía dice que su valonqar (hermano pequeño en valyrio) rodeará su cuello y la asfixiará. Ella siempre ha pensado que es Tyrion pero la cosa no está tan clara.
Si hay algo que caracteriza a Cersei es el incesto con su hermano Jaime. Es verdad que a medida que la trama avanza nos vamos dando cuenta de que el incesto es mucho más. Para ellos es una conexión sobrenatural porque siempre han estado juntos. Ya en el vientre de su madre lo estaban. Llegaron juntos al mundo. Cersei no entendía porqué los educaban de manera distinta. Mientras Jaime entrenaba con armas y podía luchar ella se limitaba a aprender modales, a coser, a tocar algún instrumento o a cantar. Siempre se ha sentido frustrada por no coger un arma y poder matar con sus manos, así que lo cambiar por secretos, mentiras y conspiraciones que se acaban volviendo contra ella.
Otro de los puntos clave para concer a Cersei es su matrimonio con Robert. En principio, estaba destina a Rhaegar, o esa era la intención de su padre pero una infancia soñando con alguien no significa que tu sueño se haga realidad. Así que después de que Robert el Usurpador conquistara el Trono de Hierro su padre la ofreció como reina. Ella no tuvo más remedio que aceptar. Y se casó ilusionada con un hombre mujeriego y juerguista que amaba más a las putas, el alcohol y la caza que a su mujer. La primera noche llegó borracho a la cama le llamó Lyanna e hizo lo que pudo. Aún así, Cersei se quedó embarazada y dio a luz a un niño que murió poco después. El primer y único hijo legítimo del Rey Robert. A partir de ahí su relación se va deteriorando a pasos agigantados y el sexo con él se convierte en una auténtica tortura así que se busca sus métodos para que no le deje embarazada. Le produce tanta repulsión que tener un hijo suyo le parece lo peor.
Que no se acueste (del todo) con su marido no significa que no tenga sus aventuras. Y es que Cersei es bastante activa. Siempre tuvo a Jaime pero si él no está presente bien le vale otro guardia. Primero fue su primo Lancel, que le recordaba a su hermano y despues Osmund y Osfryd Kettelback. Sus tres hijos son de Jaime, por supuesto. Él es el único hombre al que ha querido de verdad y con del único que quiso tener un hijo pero su relación se deteriora muchísimo cuando Jaime vuelve de su encierro en Aguasdulces con una mano de menos.
La Lannister quiere gobernar por medio de sus hijos. Primero Joffrey que se vuelve incontrolable y más tarde con Rickon, mucho más dócil por fin consigue cumplir su sueño aunque sea por poco tiempo. Su miedo a Joffrey, ese hijo que se ha convertido en un monstruo es uno de los puntos fuertes de la serie de la televisión. Mientras en el libro se muestra ciega, sorda y muda con respecto a su hijo en Juego de Tronos Cersei llora y se lamenta por el carácter de su primogénito. "Un castigo por sus pecados" por el incesto, como la locura de los Targaryen. Este detalle le hace infinitamente más cercana y rica en matices que la simplemente retorcida, conspiradora y conspiranoica de los libros.
Cersei es la contraposición de Cathelyn Stark y la verdad es que las dos se parecen mucho más de lo que querrían. Ambas son madres, ambas hacen lo que sea por sus hijos, ambas ven conspiraciones y enemigos donde no los hay y las dos acaban pagando el no ver el verdadero peligro. El caso es que Cat siempre ha caído mejor que Cersei, seguramente porque la rubísima siempre ha sido un personaje mucho más extremo. Mucho menos sutil e inteligente de lo que ella se piensa y porque, en el fondo siempre ha usado a sus hijos para sus ambiciones. Y es que Cersei piensa que es un verdadero león, la verdadera imagen de Lord Tywin, no sus hermanos. Pero el hecho es que quien más se parece a su padre es Tyrion.
Siempre ha sido una mujer atractiva y noble, como tal, teniendo en cuenta que la educaron para ello, ha explotado su físico al máximo y lo sigue haciendo. El problema llega cuando ya no es la misma de antes. Cuando se da cuenta de que ya no es una jovencita de 20 años con las cosas en su sitio. El momento le llega después de haberse acostado con media Guardia Blanca e intenta acusar a Margaery de fornicar con ellos. La acusación se le vuelve como un boomerang y es ella la que acaba encerrada en una celda del Septo de Baelor obligada a confesar sus pecados y a pasearse desnuda por la ciudad. La humillación es muy grande y ya no podrá ser la reina. A pesar de todo sigue maquinando su venganza. Para vencer a alguien como Cersei Lannister hace falta matarla y el odio mutuo que siente por Tyrion tiene que jugar su papel.